Un hombre de conocimiento, debía estar “bien despierto”, para tener acceso a dos aspectos relacionados y obligados de la consciencia. La “consciencia de intención” era conocer los factores implícitos en la relación entre el propósito específico de cualquier acto obligatorio y el propósito de él mismo al actuar. La “consciencia de flujo esperado”, se refería a la certeza de lo que era capaz de percibir en todo momento.
Así podría advertir los cambios más sutiles. Esta consciencia de los cambios significaba el reconocimiento e interpretación de los augurios u otros hechos relacionados con lo no ordinario.
Un guerrero estaba obligado a “confiar en sí mismo”, es decir, tener la seguridad de que el propósito específico del acto que eligió realizar, era el único camino plausible. La confianza en sí mismo, era uno de los aspectos importantes porque daba la capacidad de reclamar el poder y porque ningún acto ofensivo de los demás podría perjudicarlo, si estaba con el ánimo correcto.
Llegar a ser un hombre de conocimiento implicaba un “proceso incesante” porque el hecho de realizar los actos impartidos no significaba necesariamente que se convertirían en tal. Nunca se tenía la certeza que el resultado fuera lo deseado. Esto significaba que se debía “renovar la empresa” que se había propuesto porque uno de sus objetivos era ganar y conservar el dominio de sí. Aún así, se sabía que igual se sucumbiría al final debido a la “vejez o la impermanencia”. Por eso mismo este camino “debía seguirse con el corazón”, para llegar a comprender que pese a la impermanencia, uno debía ser capaz de hallar satisfacción y cumplimiento personal en el acto de escoger la alternativa más tratable e identificarse con ella.
Los aliados
El aliado era la cualidad sólo identificable con el hombre de conocimiento. Este era un poder capaz de transportarlo más allá de sí mismo. Para entrar en contacto con el aliado y con el fin de poder soportar el contacto con tal encuentro, era requisito disminuir al mínimo todo lo superfluo en la vida de uno.
Hola excelente documento, me parecio muy interesante y muy util para aquellos que estamos introduciendonos al camino del conocimiento y tambien para aquellos que queremos continuar con las costumbres de esos chamanes de los que quedan pocos y que nadie busca su conocimiento para futuras generaciones para perpetuar nuestras raices indias y con gran cultura, gracias…
Soy Un Yaqui de Cajeme y tambien decendiente de Yumas y conozco la historia de muchos de los de nuestro pueblo y conozco la historia de Juan y de su hijo Ignacio, la de sus hijos putativos que abandonó en Sinaloa asi como la de sus nietos y quiero hacer una aclaración: mencionas que Don Juan fue llevado a Yucatán y eso nunca sucedió. Efectivamente para exterminarnos algunos de nuestros antepasados fueron llevados a Yucatan para ser usados como mano de obra esclava en el cultivo del henequen. Pero a otros los llevaron a Valle Nacional en Oaxaca. Don Juan asi como sus parientes y vecinos fueron llevados a este úlimo lugar. Tanto Yucatan como Valle Nacional son lugares muy húmedos, loe yoris suponian que como somos de tierra seca ibamos a perecer en tierras húmedas mientras sacaban provecho de nuestra mano de obra, ya que los yaquis somos gente muy fuerte y resistente de una estatura muy superior a los demas grupos indegenas. Pasando al tema histórico que quiero aclarar. Don Juan trabajaba en el cultivo de la caña de azucar en una de las haciendas dedicadas a ese cultivo. Como eramos esclavos los yoris podian matarnos cuando quisieran, de ahi que el capataz de la hacienda decide matarlo por un conflicto menor, en aquella epoca valía mas la vida de un cerdo que de un Yaqui. En el estado de Oaxca Don Julian quien era actor de tipo racial español y curandero lo encontró. El Nagual Julian viajaba mucho de Oaxaca a Durango, porque su benefactor el Nagual Elías era un indio Mazateco originario de Oaxaca y heredero de una Hacienda en Durango que a su vez heredó a el Nagual Elías. Don Genaro tambien era un indio Mazateco de Oaxaca. En el libro de viaje a Ixtlán, se refiere a Ixtlan Oaxaca. Don Genaro y Don Juan vendian plantas medicinales en el tianguis de Oaxaca cuando eran Jovenes. Don Juan no se sujetaba a ser un “indio” tambien era accionista en varias compañías y cuando iba a la ciudad de Mexico iba a verdaderos negocios. Y tenia propiedades en todo México. En Oaxaca, Oaxaca. En Tula Hidalgo (donde se encontraba con el desafiante de la muerte) en Chihuahua y Durango, en Arizona y lo mismo lo veian en los Angeles cerca de Westwood o en la cd. de México por la Alameda o en el cafe tacuba ahi por el zócalo…… si quieren saber mas escribanme ciudadano.x@live.com.mx