El resultado podría ser que la persona sutilmente percibiera que el soñador estuviera allí. Éste podría percibir pequeños detalles particulares del sitio porque la segunda atención estaría fija en ellos.
La voluntad, para don Juan, es el control de la luminosidad del cuerpo, en cuanto a campo de energía, un estado de ser al que se puede llegar. Se le experimenta como una fuerza que irradia de la parte media del cuerpo después de un momento de silencio absoluto, temor extremo o profunda tristeza. La felicidad no permite la concentración requerida para usar la luminosidad del cuerpo y convertirla en silencio.
El silencio permite que surja el “intento” de dirigir la segunda atención. El intento y el efecto son la voluntad. El intento de volar produce el efecto de volar.
La voluntad pertenece al otro yo, cuando soñamos entramos al otro yo, y conocemos muy poco de él. Nuestra tarea es recordar el resto. La única manera de recordarlo es disparando el cuerpo de sueño. El cuerpo de sueño puede hacer el intento de atravesar una pared, porque conoce el intento de desaparecer en el aire.
Acechar
Es un conjunto de procedimientos y actitudes que permiten extraer lo mejor de cualquier situación concebible.
El guerrero acechador siempre recuerda los siguientes principios:
l.- Todo lo que nos rodea es un misterio insondable.
2.- Debemos tratar de descifrar el misterio pero sin tener la menor esperanza de lograrlo.
3.- Él es un guerrero consciente del insondable misterio que lo rodea y consciente de su deber de descifrarlo, que toma su legítimo lugar entre los misterios y él mismo se considera uno de ellos. Por consiguiente, el misterio de ser no tiene fin, aunque ser signifique ser una piedra, un insecto o un hombre. Esa es la humildad del guerrero. Uno es igual a todo.
4.- No tener miedo a nada, sólo así los poderes que guían a los acechadores, les abren el camino y los auxilian. Cuando se enfrentan a una fuerza superior, con la que no pueden lidiar, los guerreros se retiran por un momento. Dejan que sus pensamientos corran libremente. Se ocupan de otras cosas, cualquier cosa puede servir. Los guerreros comprimen el tiempo, todo cuenta aunque sea un segundo. En una batalla por
su vida, un segundo es una eternidad, una eternidad que puede decidir la victoria.
Hola excelente documento, me parecio muy interesante y muy util para aquellos que estamos introduciendonos al camino del conocimiento y tambien para aquellos que queremos continuar con las costumbres de esos chamanes de los que quedan pocos y que nadie busca su conocimiento para futuras generaciones para perpetuar nuestras raices indias y con gran cultura, gracias…
Soy Un Yaqui de Cajeme y tambien decendiente de Yumas y conozco la historia de muchos de los de nuestro pueblo y conozco la historia de Juan y de su hijo Ignacio, la de sus hijos putativos que abandonó en Sinaloa asi como la de sus nietos y quiero hacer una aclaración: mencionas que Don Juan fue llevado a Yucatán y eso nunca sucedió. Efectivamente para exterminarnos algunos de nuestros antepasados fueron llevados a Yucatan para ser usados como mano de obra esclava en el cultivo del henequen. Pero a otros los llevaron a Valle Nacional en Oaxaca. Don Juan asi como sus parientes y vecinos fueron llevados a este úlimo lugar. Tanto Yucatan como Valle Nacional son lugares muy húmedos, loe yoris suponian que como somos de tierra seca ibamos a perecer en tierras húmedas mientras sacaban provecho de nuestra mano de obra, ya que los yaquis somos gente muy fuerte y resistente de una estatura muy superior a los demas grupos indegenas. Pasando al tema histórico que quiero aclarar. Don Juan trabajaba en el cultivo de la caña de azucar en una de las haciendas dedicadas a ese cultivo. Como eramos esclavos los yoris podian matarnos cuando quisieran, de ahi que el capataz de la hacienda decide matarlo por un conflicto menor, en aquella epoca valía mas la vida de un cerdo que de un Yaqui. En el estado de Oaxca Don Julian quien era actor de tipo racial español y curandero lo encontró. El Nagual Julian viajaba mucho de Oaxaca a Durango, porque su benefactor el Nagual Elías era un indio Mazateco originario de Oaxaca y heredero de una Hacienda en Durango que a su vez heredó a el Nagual Elías. Don Genaro tambien era un indio Mazateco de Oaxaca. En el libro de viaje a Ixtlán, se refiere a Ixtlan Oaxaca. Don Genaro y Don Juan vendian plantas medicinales en el tianguis de Oaxaca cuando eran Jovenes. Don Juan no se sujetaba a ser un “indio” tambien era accionista en varias compañías y cuando iba a la ciudad de Mexico iba a verdaderos negocios. Y tenia propiedades en todo México. En Oaxaca, Oaxaca. En Tula Hidalgo (donde se encontraba con el desafiante de la muerte) en Chihuahua y Durango, en Arizona y lo mismo lo veian en los Angeles cerca de Westwood o en la cd. de México por la Alameda o en el cafe tacuba ahi por el zócalo…… si quieren saber mas escribanme ciudadano.x@live.com.mx