Nuestras reacciones desproporcionadas se detectan fácilmente cuando estamos atentos a ese fenómeno. Sin embargo, se nos pueden escapar. Por eso es que hay que vigilar para detectarlas. y para ello, primero hay que darse cuenta cuando una reacción es desproporcionada a la situación que estoy enfrentando, y luego tirar del hilo para hacer consciente la historia que hay detrás de dicha reacción.

Para ir en búsqueda de mis heridas del pasado puedo:
a) Buscar la sensación dolorosa de hoy recordando lo que la provocó.
b) Cuando encuentro la sensación, me vuelvo hacia el pasado y busco qué me hizo
mal entonces? Cuándo se produjo? Qué funcionó mal en mí entonces?
c) Voy lo más lejos posible por el camino del pasado.
d) Me detengo cuando la sensación desaparece.

Desdramatizar el presente es importante para no exagerar los acontecimientos y no envenenar las relaciones de hoy. Efectivamente por causa de estas bolsas de sufrimiento uno ha exagerado la situación que, si uno la analiza, se da cuenta que tiene relación con lo que causó la herida.

Llegará un día en que nuestro sistema de defensa desaparecerá porque estaremos sanados totalmente de nuestro pasado. Esto sucede progresivamente a medida que uno se vuelve fuerte en su ser interior y es capaz de existir según lo que realmente es.

André Rochais

Traducido y extractado por Sonia Ramírez de
Apuntes Curso PRH.
86 Poitiers
France.