Fuera de ser inútil esta aproximación, se basa en un débil modelo. La idea de que se pueden ir arrancando las capas de verbalización de la misma forma como se pelan las capas de una cebolla, resulta ser equivocada. A diferencia de las capas de la cebolla, las cuales se pueden contar, las capas que existen en el dialogo interno son infinitas. Como lo mencionamos anteriormente, a pesar de que las diferentes capas se homogenizan, psicológicamente hablando, desde un punto de vista lógico cada una mantiene su propia identidad. Entonces, mi falla para penetrar en la capa final del diálogo, más atrás del cual está el silencio, es más fácilmente examinable desde una perspectiva lógica más que desde una psicológica. La razón de nuestra falta de capacidad para penetrar exitosamente los niveles de diálogo no está en que uno no tenga las habilidades, o no haya desarrollado suficientemente determinadas facultades, sino que el proyecto en sí tiene fallas. Si, por ejemplo, uno no puede visualizar a través de la vista interna, en forma precisa, una pintura compleja y detallada es porque nuestras capacidades de visualización no se han desarrollado suficientemente. Pero si uno no puede visualizar un circulo cuadrado, el problema no es de habilidades, sino que de la imposibilidad de llevar a cabo una tarea cuya descripción es inconsistente o incluye una contradicción. Para embarcarse en un proyecto de ese tipo hay que ser ciego al hecho que el objetivo es inconsistente de acuerdo con el método descrito para obtenerlo, o es completamente contradictorio.
Yo he procedido como si el silencio, o la mente en su estado natural manifestada a través del silencio, fueran algo separados de mi mismo. Yo como sujeto he encontrado el objeto de mis esfuerzos, mediante haber completado la remoción de las diferentes capas de diálogo. He estado buscando, tratando de ubicar, alcanzar, o descubrir algo. No me di cuenta que mientras haya alguien que esté desojando las capas y algo que sea deshojado, y mientras haya alguien que está trabajando y algo sobre lo que se esté trabajando, siempre habrá un otro más allá del último algo que alcanzamos. Esto es simplemente otra forma de decir que las categorías del sujeto y sus objetos son ilimitadas. El problema puede ser presentado de tal forma que sus contradicciones inherentes sean obvias. Obtener el silencio pasando más allá del último miembro del conjunto que llamamos el sujeto y sus objetos, es imposible porque se trata de un conjunto que no tiene un último miembro. Una vez que se ha tomado consciencia que el silencio no se descubrirá más atrás del último componente de una serie infinita, se puede ver que no se puede proceder a través de la relación sujeto-objeto. Sujeto y objeto per se deben ser trascendidos. Uno no puede alcanzar, encontrar, lograr, ubicar, o aproximarse al silencio excepto transformándose en él. Uno debe ser el silencio.
SI LEEMOS EL TEXTO,NOS DAMOS CUENTA QUE LA MEDITACION,ES IGUAL AL CRECIMIENTO DE UN BEBE, LLEGA EL MINUTO QUE LOS RUIDOS EXTERIORES ,LLANTO,UN LADRIDO. UN GRITO,NO LO SIENTES, ESTAS EN TU )(ATMAN ,ALMA) TAN PROFUNDO QUE NO AFECTA DE A POCO, SE LLEGA,QUERIENDO SE LLEGA MAS, CARIÑOS A TODAS LAS PERSONAS INQUIETAS DE ALMA QUE ESCRIBEN. GRACIAS ROSARIO,