El alumno en el aquí y ahora toma en cuenta lo que le está sucediendo y al estar presente con toda su atención, refuerza el grado de conciencia de la experiencia que se está viviendo.

Al vivir la realidad del propio cuerpo podemos comprender los mensajes que surgen de él como la fuente de su sabiduría.

Quien se ocupa del crecimiento
humano debe trabajar consigo mismo.
Es un compromiso con la vida y su
responsabilidad como profesional
(B. Vishnivetz)

Mejorando nuestras condiciones cotidianas de vida.

De manera general todos los que deseen mejorar la relación con su cuerpo pueden encontrar importantes beneficios en la práctica de la Eutonía, materializados tanto en respuestas fisiológicas (mejora del sueño, del ritmo intestinal, disminución de dolores de cabeza, etc.) como también emocionales (aumento de la autoconfianza, disminución de excesiva autoexigencia, eliminación del stress, etc.)

Además de los beneficios generales señalados, la Eutonía es útil para abordar otros problemas más particulares. Al trabajar muy específicamente sobre los huesos y articulaciones, esta disciplina es especialmente indicada para quienes tienen problemas del sistema músculo-esquelético: contracturas constantes, artrosis, artritis, discopatías, lumbalgias, cervicalgias.

Estos problemas pueden estar relacionados con la práctica de ciertas profesiones o actividades. Así, es muy frecuente que quienes tocan un instrumento musical como profesionales desarrollen periartritis, o quienes están sentados frente a una computadora varias horas al día padezcan problemas cervicales.
En estos casos es importante señalar que, además de aliviar las molestias, la Eutonía brinda recursos para poder continuar con la actividad sin reincidir en las posturas que originaron las molestias. No es sólo un paliativo – aunque esto ya es muy importante en los casos agudos – sino que además permite revertir situaciones que de otro modo podrían terminar en una cirugía (por ejemplo, algunas hernias de disco)

La Eutonía incide también en la mejora de enfermedades o trastornos del aparato locomotor, sistema nervioso, órganos de la digestión, vías respiratorias, sistema circulatorio, órganos genitales, vías urinarias, sistema endocrino, órganos de los sentidos, así como trastornos funcionales, huesos y articulaciones.