Hatha Yoga.- Cuerpo Físico
Jnana Yoga.- Intelecto
Bhakti Yoga.- Emoción Religiosa
Karma Yoga.- Acción
Raja Yoga.- Consciencia

El propósito de todas las formas de yoga es liberarse del ego personal, la fuente de nuestros sufrimientos y nuestras ilusiones. El yoga subyace en las prácticas espirituales de todas las grandes religiones del mundo. Hay yoga hindú, yoga budista, yoga cristiano, yoga islámico y yoga taoísta. Hay también formas de yoga totalmente independientes de cualquier religión. Las variadas formas de yoga son todas manifestaciones de tres instintos básicos en el hombre, que se muestran como las tres voluntades superiores: la voluntad de poder, la voluntad de significado y la voluntad de autotranscendencia. Mediante el yoga la persona aprende como entrenar estas voluntades y como usar sus poderes para alcanzar la liberación.

Las técnicas de las diferentes formas de yoga se relacionan con las divisiones naturales de la existencia del hombre. Consideraremos estas formas separadamente.

El Hatha Yoga ayuda al practicante a obtener pleno control sobre las funciones de su cuerpo físico. En el hombre no entrenado, la mente consciente sabe muy poco de lo que pasa por debajo del nivel de la consciencia. La mente consciente es como la punta de un iceberg, del cual nueve décimos están sumergidos y fuera de alcance. Nuestro cuerpo es un misterio. No sabemos prácticamente nada de lo que sucede en él y no tenemos control sobre nuestros propios funcionamientos internos. Todo lo que sabemos es que nuestro humor y nuestras sensaciones cambian. Podemos sentirnos felices o miserables por razones que no podemos discernir. Todos estos cambios de humor se deben a procesos que tienen lugar bajo la superficie, pero no tenemos control sobre ellos, y hasta ahora están a merced de nuestra química interna. Si algo va mal con nuestro hígado, toda nuestra manera de mirar al exterior cambia.

Un estudiante de Hatha Yoga aprende gradualmente a comprender lo que pasa bajo la superficie. Aprende conscientemente a percibir y controlar muchos procesos que comúnmente están fuera de alcance. Llega a ser el maestro de su cuerpo, en lugar de ser su esclavo. Esta maestría sobre el cuerpo confiere al Hatha yogi poderes que parecen extraordinarios. Los miembros de una expedición a los Himalayas se admiraron de encontrar a un peregrino nepalés livianamente vestido y descalzo, viviendo en aparente comodidad en medio de la nieve. Sometieron al pobre tipo a una batería completa de pruebas científicas, esperando descubrir el secreto de su extraordinaria resistencia al frío. Por supuesto, no descubrieron nada. El secreto era el Hatha Yoga.