En la relación con Dios también existe el peligro de la ilusión. Se puede tomar por Dios la idea que se tiene de Él. Aun cuando sea derivada de una buena fuente, la idea de Dios sigue siendo una idea. Vivir la experiencia de Dios es algo muy distinto que tener ideas sobre Dios.
Repercusiones sobre el desarrollo personal:
El hombre que tiene la experiencia de ser amado por ese Dios que encuentra en lo más profundo de su ser está satisfecho e, incluso, colmado. La consideración de los demás no le es indispensable.
Ese Dios se convierte en un amigo, un guía, un modelo de vida y colma la necesidad de una relación en profundidad. Entrar en la zona profunda es comunicarse con un Dios a quien se ama y de quien uno se siente amado. Escuchar su ser en profundidad es escuchar a Dios y saber su voluntad. Vivir fiel a su ser es igual que vivir fiel a Dios.
Cuál es la religión verdadera?
En la línea de lo que hemos expuesto, desde el punto de vista planteado aquí, creemos poder afirmar lo siguiente: la verdadera religión es aquella cuyo mensaje revela más fielmente el hombre a sí mismo y le permite realizarse siendo fiel a lo mejor de sí mismo.
Antes de considerar el problema de un cambio de referencia ideológica o religiosa, hay que vivir cada vez más en verdad, es decir, en referencia al Absoluto interior tal como se le percibe. Esta fidelidad impulsará hacia un aumento de luz y de verdad, y realizará a la vez el crecimiento del ser.
Traducido y extractado por Sonia Ramírez de
Apuntes Curso PRH.
86 Poitiers
France.
Quien desee tener una inigualable des-
cripciòn de una relaciòn con lo Absoluto
escrita por el filòsofo, sicòlogo y mìs-
tico J. Krishnamurti, puede leer su Dia-
rio escrito durante seis meses a partir
de junio de 1961. El nombra lo Absoluto
como LO OTRO.