Al llegar a percibir la comunidad humana como parte de una comunidad planetaria, asumiríamos una obligación de vincular los intereses humanos con los intereses de todos los seres sensibles. Si nuestro núcleo familiar pudiera extenderse a nuestra familia planetaria, podríamos reconocer la importancia de proteger estrictamente y distribuir equitativamente los recursos materiales. Sería fácil apreciar aquello con lo que nos relacionáramos íntimamente.

Cómo percibe usted el mundo natural? Cómo define usted sus necesidades en relación a las necesidades del planeta? Para mí, lanzar estas preguntas es posible sólo en la medida en que yo esté más consciente de que las necesidades humanas son las mismas que las del planeta. Para citar al poeta budista Gary Snyder, el gran desafío de mi vida ha sido aprender a caminar livianamente sobre la tierra”.

Ames B. Colt

Traducido y extractado por Tatiana Reyes de
Biography of Ames B. Colt
University of Massachusetts-Boston, 1993