maestro-interior-554x280El propósito de la vida es alcanzar conocimiento. Cuando la mónada, esa fracción individualizada del misterio eterno, “probó la fruta del árbol del Conocimiento” y aprendió a hacer comparaciones entre dos o más cosas, se inició el gran esquema de la evolución humana. En lo que respecta a este concepto, la creación ha terminado, pero el proceso de llevarla a la manifestación y evidenciarla corresponde a la evolución.

Conocimiento es consciencia. Consciencia es el resultado de las observaciones hechas en lo que concierne a la relación que existe entre los objetos. Sólo tenemos conocimiento de aquello de lo que somos conscientes. La información no es necesariamente conocimiento, sino aceptar como verdaderas las observaciones que han penetrado en la consciencia de otros individuos, las cuales son de valor, pues proporcionan una base para la observación personal. Si no son refutadas por la investigación basada en tal información, ésta puede aceptarse como conocimiento. Sin embargo, lo que no entra definidamente en la consciencia del individuo mediante la observación, no puede considerarse como conocimiento.

Vida, consciencia, conocimiento, son sinónimos basados en un proceso esencial. El propósito de la vida es demostrar consciencia por medio de la observación y la comparación, y a esto se lo denomina conocimiento. En el universo, las formas son vehículos que tienen el propósito de demostrar la vida y la consciencia. A medida que la vida se demuestra y manifiesta gradualmente como consciencia y conocimiento, tanto más compleja es la forma para expresarla; por lo tanto, debe considerarse a la forma como que indica una cualidad o nivel de consciencia, que la emplea como instrumento de expresión. Vida, conocimiento, consciencia, forma, se unen en un todo sinónimo y sintético.

Cuando las mónadas, avanzadas de la naturaleza de Dios, iniciaron el proceso de evolucionar su esquema, cada una escogió determinada línea de procedimiento o método de investigación y observación, mediante el cual la consciencia pudiera desarrollarse. Esta línea de acción se llama técnicamente RAYO. Existen siete rayos, cada uno tiene una denominación técnica, pero los tres métodos prominentes en función son el científico, el esotérico y el místico.